¿Qué ha pasado en el Prado?

Investigando e investigando, hemos recopilado de distintas fuentes una mezcla de la información más importante que hay que citar respecto a lo ocurrido hace menos de un mes en el Museo del Prado. ¡Qué! ¿Os apatece un viaje a la Florencia del siglo dieciséis?




La copia de la Gioconda del Museo del Prado fue sometida a un estudio técnico y restauración con motivo de la solicitud del Louvre. La melliza de la Mona Lisa ha desvelado sus historia tras un proceso de estudio y restauración de dos años. Nunca tuvo tantos ojos que la escrutaran pese a que lleva casi 200 años expuesta a las miradas. La melliza de la Mona Lisa (que 'vive' en el Museo del Prado desde 1819) nunca había despertado las pasiones que levanta su hermana en el Louvre parisino.


Ésta réplica llevaba en los catálogos reales de España al menos desde 1666 (primera referencia y de ahí su inscripción en el margen inferior izquierdo 666). Apenas algo más de siglo y medio después de la creación de la Gioconda. El Museo del Prado era consciente de la existencia en su pinacoteca de una copia de la famosa Mona Lisa de Leonardo Da Vinci. Lo que ignoraba es que se trataba de una copia tan similar y que, posiblemente, se hubiera podido realizar en su mismo taller del pintor.

Sobre su autoría, es posible situarla estilísticamente en un entorno milanés próximo a Salaï o quizás a Francesco Melzi, los alumnos de más confianza del maestro y herederos de su obra. Aún no hay certeza científica. Cada correción hecha por Leonardo se repite en la copia: la posición de los dedos o el contorno del velo permiten comprobar que el autor anónimo siguió los pasos del maestro. 


Una de las aportaciones de interés fue la identificación del soporte de esta obra como tabla de nogal (madera habitual en obras de pequeño formato de Leonardo) y la constatación de que la pintura no posee la tradicional preparación de yeso, sustituida en su caso por un tipo de preparación que aparece en numerosas obras de Leonardo y su taller.


El repinte negro que cubría el fondo, quizás hecho 250 años después de su ejecución, se ha eliminado y se han recuperado el paisaje y los vivos colores originales. Una capa de barniz oxidado protegía el fondo. A pesar de su diferente calidad pictórica respecto a la original, el paisaje recobrado es acorde con el cromatismo y las formas de los escenarios de Leonardo.  Miguel Falomir, experto en renacimiento italiano del Museo del Prado, dijo que la obra ‘invita a mirar con unos ojos completamente distintos a la obra original’.

La Gioconda española viajará el próximo 13 de marzo a Paris, para encontrarse con su hermana gemela, y allí estará hasta junio, será entonces cuando regrese a su casa española.

Comentarios

Entradas populares